Home Artists Posts Import Register

Content

En este relato ''hablan'' dos personas. El chico ''Light'' es el texto en negrita mientras que ella ''Misa'' es el texto en cursiva. No necesitas conocer a los personajes para disfrutar este relato.

Eso es todo, comienza el relato:


Hace ya un tiempo que Light y yo estamos saliendo pero sigue sin hacerme mucho caso. Sé que no le interesa demasiado pero no voy a rendirme, soy capaz de hacer cualquier cosa por él. Si fuese necesario sería capaz de chantajearle con tal de conseguir que esté conmigo. Al principio sería forzado, pero al final acabará enamorándose de mí, lo sé. Hoy mismo vamos a quedar en su casa y vamos a follar, tengo que conseguirlo, me da igual que esté su familia allí, quiero que tome mi cuerpo.

Misa viene hoy a casa y sé lo que quiere, hoy tendré que hacerlo con ella.  Tener sexo con una chica, sin duda es debería estar más contento pero… ¿Tiene que ser con ella? ¿De verdad? No es para nada mi tipo y está bastante loca. Menos mal que al menos puedo controlarla.

Mis padres han salido por lo que puedo estar tranquilo por si hacemos ruido, además le he pedido a Ryuk que salga un raro. Bastante complicado va a ser follar con ella para que además tenga que tener a Ryuk mirando. Si no me equivoco debe de estar al llegar.

- ¡Light! ¡Soy yo! ¡Abre la puerta! - Toco el timbre pero también me pongo a gritar desde fuera de casa para llamarte.

Abro la puerta rápidamente al escuchar aquellos gritos.

-¿Pero qué haces? – Intento contener la rabia que me da que hayas llamado tanto la atención.

-No puedes gritar así aquí. Tenemos que llamar la atención lo menos posible. Bueno, pasa, vamos a mi cuarto.

-Muy bien Light, voy subiendo.

Dejo los zapatos en la entrada de la casa y subo rápidamente a la habitación de Light. Lo primero que hago es lanzarme en la cama y disfrutar de estar en la habitación de mi amado Light.

-Bueno, hoy tenemos que hacer nuevos planes y organizar algunas cosas.

- ¿Ryuk no está hoy aquí?

-No, ha salido un rato a comerse unas manzanas que le he dado.

Venía con ganas de hacerlo, pero al ver que los padres no estaban y Ryuk tampoco entendí que había preparado este día para hacerlo, aunque no lo dijese abiertamente. ¡Qué bien! Voy a poder chillar como una loca.

-¿Por qué no vienes a la cama conmigo un rato antes de hacer planes?

Realmente seguía sin ganas de hacer nada, pero de nada servía alargar lo inevitable. Me senté en la cama cerca de ella pero con los pies todavía tocando el suelo.

-Ya estoy aquí. Que quieres hacer.

-Biennn.

Te abrazo y te tumbo en la cama conmigo.

-Vamos a besarnos Light.

Me mentalicé en lo que íbamos a hacer y directamente empecé a besarte para al menos sorprenderte un poco.

Vaya sorpresa, iba a morirme de placer. Light estaba besándome y sabía que solo era el comienzo de una larga velada. Seguí con aquel beso y metí subí el nivel metiendo un poco la lengua en su boca.

Aunque el beso no estaba mal, no me gustaban demasiado los besos con lengua, me parecen demasiado ordinarios, así que dejé que ella metiese un poco su lengua, pero yo no le seguía demasiado el juego. Al cabo de unos segundos (cuando ya no lo soportaba más) prefería apartarme y empezar a besar su cuello. Mientras antes fuésemos al grano mucho mejor.

Percibí que no le gustaban mucho los besos con lengua, pero era mi oportunidad y seguí aunque no le gustase. Lo que no esperaba es que tomase la iniciativa y empezase a besarme el cuello. ¡Eres el mejor Light, te quiero!

-Puedes tocarme las tetas si quieres Light, son para ti.

Aunque seguía sin sentirme muy atraído por ella, no pude resistir su petición. Ya que íbamos a hacerlo mejor disfrutarlo al máximo, por lo que empecé a tocar los pechos de Misa mientras seguía besándole el cuello.

-¡Me derrito Light! Me encanta, no pares.

-Pero no grites tanto.

-Venga, vamos a quitarnos la ropa.

Agarré a Light por su camiseta para quitársela y ver sus pectorales. ¡Vaya cuerpazo!

-Quítame ahora tú el vestido.

-Date la vuelta.

Misa se incorporó y yo solo tuve que mover un poco sus tirantes para quitarle el vestido. No llevaba sujetador, por lo que sus pechos quedaron directamente al descubierto. Intenté que no se me notase demasiado pero ahora si me estaba excitando.

-¿Te apetece hacerlo hoy entonces?

-¿Eres tonto Light? Pues claro.

En ese momento me levanté de la cama para quitarme por mi misma las bragas mientras seguía hablando.

-Ya te he demostrado que soy capaz de cualquier cosa por ti, pero ahora voy a volver a hacerlo. Túmbate en la cama.

Me tumbé boca arriba simplemente esperando a que ella hiciese lo que tenía planeado. Yo, seguía con los pantalones puestos pero imaginaba que iban a durar poco.

Empecé a quitarte mientras hablaba.

-Mientras estés conmigo puedes follarme cuando quieras y no tienes que preocuparte por mí. Puedes follarme 5 veces seguidas o hacerlo con mucha fuerza, no me voy a quejar. También puedes hacérmelo por el culo cuando quieras o hacerte todas las mamadas que quieras. Yo estaré debajo de tu mesa chupándote la polla todo el día si es lo que quieres. También puedes…

Iba a seguir hablando, pero en ese momento le quité los calzoncillos y me encontré con un pollón increíble. Era enorme. No solo era guapo y listo, además le medía más de 20 centímetros. Estaba deseando metérmela en la boca, pero quería seguir mirándola un poco más antes de chuparla, por lo que la agarré y empecé con una buena paja.

-¡Vaya polla Light! Cada día te amo más.

No había pensado nunca en lo que me había dicho y la verdad es que me gustó. Hasta ahora Misa solo me había dado problemas, pero poco a poco me parecía cada vez más útil utilizarla. Ahora además podía follarmela sin necesidad de esforzarme, ella era feliz con solo chuparme la polla y eso me gustaba. 

Todas las proposiciones que me había dicho me habían puesto más cachondo que besarla o que ver su cuerpo, me ponía tener tanto poder sobre ella. 

-¿Vas a hacer entonces todo lo que te pida en la cama?

-Dime qué quieres ahora mismo.

-Chúpamela.

-Lo estaba deseando.

Me la metí en la boca directamente, sin jueguecitos previos. En unos segundos ya estaba intentando metérmela hasta el fondo, pero era imposible. Aún así quise que disfrutase de esa mamada y se la chupé como una loca.

-A partir de ahora soy tu contenedor de semen. Cuando quieras correrte hazlo siempre en mi cuerpo, solo tienes que llamarme.

La cabrona me la estaba chupando muy bien, no imaginaba que fuese gustarme tanto su boca y su lengua, pero seguía poniéndome más cachondo lo que me estaba diciendo.

-Eres una buena novia.

Quise agradecerle de alguna forma todo lo que estaba haciendo por mí.

-¡Light! Te quiero tanto Light. Ven, dame tus manos.

Alcé mis manos para que Light me diese sus manos. El pensó que era simplemente para agarrarnos mutuamente, pero entonces le puse las manos en mis coletas.

-Tú mandas Light, puedes follarme a la velocidad que tú quieras.

Al tener las manos agarrando sus coletas entendí lo que quería. Podía follarme su cabeza a la velocidad que quisiese. Esta chica estaba loca, loca por mí. No pude evitar aprovecharme de la situación, cada vez tenía más ganas de correrme y todo lo que hacía me estaba poniendo a mil.

-Hoy vas a probar mi semen. Trágatelo todo.

-Gracias Light, me haces muy feliz.

Agarré las coletas de misa con fuerza, como si condujese una moto y empecé a moverle la cabeza para correrme en su boca. Tenía bastantes ganas de correrme y me quedo claro que ella era capaz de aguantar cualquier cosa por mí, por lo que no tuve miedo en ser bastante rudo.

Que Light me usase para calmar sus impulsos sexuales me ponía a mil por hora, estaba muy cachonda y muy feliz. Me estaba atragantando con su polla y empezaba a tener arcadas, pero no me importaba en absoluto, solo estaba esperando a sentir su semen en mi boca, eso me haría mil veces más feliz.

-Ahhhh, Misa…. Me corro.

No le día mucho tiempo para prepararse, pero intenté avisarla y dejé de apretar para que pudiese recibirlo todo. Empecé a correrme como una bestia. Aunque era apuesto y listo, no solía tener relaciones con chicas por lo que esta experiencia me gustó bastante y la disfruté con gusto, dejando en la boca de Misa una gran cantidad de semen.

No podía ser más feliz, era como si Light estuviese dándome todo su amor en forma de semen. Mi boca estaba tan llena que el semen se me escapa por la barbilla y por la comisura de los labios. Era espeso y amargo, el sabor de Light que tanto ansiaba probar. Conseguí hablar con el semen en la boca, aunque fue complicado.

-¿Quieres ver cómo me lo trago todo?

-Vale.

No me gustaban mucho ese tipo de filias, pero acepté para hacerla feliz.

-Mira.

Abrí la boca y le enseñé el semen en mi boca y en mi lengua. Después cerré la boca, lo tragué todo y le enseñe mi boca limpita.

-Hoy no terminamos hasta que te hayas quedado bien satisfecho, puedo chupártela otra vez si quieres.

-Túmbate, voy a follarte.

Sin excusas, ella era pesada, complicada y problemática, pero ahora mismo tenía ganas de follarmela.

-¡Siiiii!

Automáticamente me tumbé en la cama y abrí las piernas, deseando que Light me follase tan rudo como me había movido la cabeza.

Continuara… (Continuará de verdad, habrá próximamente una segunda parte).

Files

Comments

No comments found for this post.